MJ
Recuerdo el año 92 no tanto por las olimpiadas de Barcelona sino por el concierto de Michael Jackson en el Vicente Calderón. Mi amigo Gustavo y yo eramos auténticos fans de Michael y convencimos a mi madre para hacer un viaje relámpago desde Zaragoza porque nos habíamos quedado sin billetes de autobús.
El concierto fue un auténtico espectáculo, algo insuperable, tanto por la música y coreografía como por la parafernalia que lo rodeaba. Recuerdo las notas del Carmina Burana abriendo el concierto con imágenes de guerras, de paz, de animales, del ser humano... y el torrente artístico que duró casi 2 horas, puro espectáculo.
Reconozco que después le abandoné, no ya por su cada vez más polémica vida sino porque mis gustos musicales iban en otras direcciones, pero siempre tenía un hueco para su música y sus bailes que imitaba de pequeño.
Hoy me he levantado con la noticia y he sentido una pena enorme. La infancia, o más bien, la falta de una infancia normal, le pasó factura a lo largo de su vida. Sus operaciones estéticas, la misteriosa decoloración de su piel, las acusaciones de pederastia y un sinfin de excentricidades más no taparán nunca el genio que había detrás de esa mascarilla, gafas de sol y sombrero.
Para mí siempre será el auténtico Rey del Pop. Descansa en Paz, MJ.
un ARTISTA de 5 estrellas
d.e.p.